Introducción:
En este trabajo
abordaré el tema de la literatura durante la época del porfiriato que duró de 1876-1911), etapa donde se
iniciaron una serie de cambios en el ámbito cultural, el objetivo es conocer aportaciones
de la mujer que marcaron la diferencia
en la literatura como una forma de
expresar la problemática social y sus necesidades.
La revista: “ La mujer Mexicana” fue una obra que exponía el rol principal de la mujer como madre y
esposa perfecta, y conforme pasaron los años pudieron tener más contacto con la
sociedad y más libertad de expresión al poder reforzar sus conocimientos y
labores mediante manuales, publicaciones
femeninas, novelas, etc. Este breve trabajo pretende dar a conocer el
proceso de cambios que permitió a la mujer destacar durante el periodo del Porfiriato en el ámbito cultural y verlo reflejado en la educación de ciudadanos
de esa época para entender nuestro presente.
De la misma forma, conoceremos las
aportaciones literarias de María Enriqueta Camarillo de Pereyra como parte del
equipo de redacción de la revista más importante y que más tarde sus obras se
vieron plasmadas en una colección de libros que fueron de gran importancia en
el ámbito educativo. Con el paso de tiempo se originaron cambios
literarios que permitieron la construcción de un concepto de infancia
acorde con el proyecto social, político e ideológico dominante en la época de
su producción, circulación y apropiación. La revisión de textos como éstos
permitió comprender mejor los cambios y las continuidades que ha tenido literatura
impactando la educación en México y el proceso del que hoy formamos parte.
La libertad de expresión
permitió tener un panorama cultural más amplio durante El Porfiriato
Importancia de la Literatura durante El Porfiriato (1876-1911)
La época del
Porfiriato dio origen a cambios culturales y una nueva forma de expresar la
historia con influencias europeas que pretendía mostrar al mundo una
civilización refinada para ocultar la intranquilidad social más en el vacío. La
etapa de estabilidad duró los mismos
treinta años que la dictadura de Díaz que dio origen al interés por
publicaciones científicas, literarias, de divulgación general, especializadas
para niños y mujeres quienes ya tenían otro panorama sobre la literatura y que
representaba gran importancia como mujer en el
ámbito intelectual y educativo para mejorar las condiciones del país. Se
comenzaron a publicar artículos escritos
por mujeres en la prensa de la época permitiendo así la libre expresión sobre
temas de interés. Las elites, clases sociales y algunas clases populares compartían
la misma noción de la familia reflejada en múltiples escritos entre ellos la
literatura. Destaca en esa época el movimiento feminista que exigía igualdad.
(Speckman, en Escalante et. al, 2008 pág. 273)
Panorama cultural mexicano
Es necesario
resaltar que la mayoría de la población de esa época no sabía leer, había un
serio problema educativo en las zonas rurales del país. Sin embargo, la estabilidad política y el crecimiento
económico impulsado por Díaz, permitieron esparcir la cultura a los
diferentes estados del país a través de “la nueva aristocracia intelectual” que
era influenciada por los franceses adoptando costumbres, en consecuencia se invirtió capital
para desarrollar la literatura y las bellas artes. La mujeres comenzaron a escribir sobre los intereses de una parte
de la sociedad porfiriana por mantener los roles que las caracterizaban en la
sociedad como ser madre y esposa perfecta, y conforme pasaron los años pudieron
tener más contacto con la sociedad y más libertad de expresión al poder
reforzar sus conocimientos y labores mediantes manuales, revistas femeninas,
novelas, etc.
En éstos, podían encontrar todos los temas
relacionados a su vida, como: moda, cocina, niños, hábitos y costumbres, etc. Durante
el siglo XIX, surgieron temas de interés de un determinado grupo de mujeres,
con el propósito de acercarse al conocimiento de la ideología femenina de la
época dando así origen a la revista: “La Mujer Mexicana”, dirigida y hecha por
y para mujeres que la administraron, y
colaboraron con sus textos desde los distintos estados de la república mexicana. (Gilly ,1979)
La mujeres
comenzaron a escribir sobre los intereses de una parte de la sociedad
porfiriana, lo que “dio un giro a la literatura de la época,
escritas por mujeres, quienes estaban dispuestas a modernizarse y participar en
los cambios del país, pero no a cambiar los valores de la familia” (Alcaraz
1987)
La revista: Mujer Mexicana fue una de las pocas
revistas dirigida por mujeres a principios del siglo XX. Aunque su periodo de
publicación fue corto (1904-1907) a través de esta se dio a conocer conocer cuáles eran los temas de interés de un
determinado grupo de mujeres, con el propósito de acercarnos al conocimiento de
la ideología femenina de la época.
El objetivo central era
analizar las ideas de matrimonio, hogar, educación, trabajo y progreso, que se
encontraban en esta publicación dirigida a las mujeres de la elite, y determinar
su desarrollo y aportación como medio impreso. (Alcaraz, 1987)
Aportaciones de la mujer mexicana en la literatura durante el Porfiriato
Mujeres de la alta burguesía
comenzaron a destacar por sus estudios y preparación intelectual
A través de la revista La mujer Mexicana se
manifestaba cierta preocupación por obtener algunos beneficios, como el de la
educación y el trabajo remunerado, por lo que se ayudaron de la prensa para
educar a sus lectoras y proporcionarles una visión diferente de la sociedad. Se
dio un giro a la literatura de la época, escritas por mujeres, quienes estaban
dispuestas a modernizarse y participar en los cambios del país, sin cambiar los
valores de la familia. (Alcaraz, 1987)
Las colaboradoras de la revista escribían por
la dignificación de la mujer misma, como gran adelanto social y su principal discurso era transmitir a sus
lectoras ser mejores en el hogar y en la sociedad, cumpliendo su rol femenino
de dar al marido obediencia, agrado y apoyo. Las autoras de La Mujer Mexicana, Dolores Correa Zapata
como directora general y María Enriqueta Camarillo de Pereyra quien colaboraba
en la edición y redacción , pensaban que la educación, a través de la
literatura ayudaría a formar mexicanos fuertes, éticos, solidarios, capaces de
formar un México más rico y poderoso que el México de esa época. Prevalecía la
esperanza de un cambio que diera como resultado una nación más justa y
equitativa, gracias a la capacitación para el trabajo y la educación,
principalmente de las clases trabajadoras urbanas y rurales. (Alcaraz,
1987 págs. 155-157).
La literatura se convirtió
en un vehículo para transmitir modelos de conducta a los niños a través de
cultura, con vistas a su desarrollo futuro como hombres y mujeres bien
adaptados, socialmente hablando, productivos y útiles para su familia y su
comunidad.
En la revista: “La mujer Mexicana”, la educación iba de la mano con el progreso. Y las autoras tenían en claro que para transformar a la sociedad se necesitaba educación, de modo que en el porfiriato se modernizó la política educativa. (Arredondo, 2008)
En la revista: “La mujer Mexicana”, la educación iba de la mano con el progreso. Y las autoras tenían en claro que para transformar a la sociedad se necesitaba educación, de modo que en el porfiriato se modernizó la política educativa. (Arredondo, 2008)
La directora y equipo de
redacción de la Mujer pensaban que era necesario apoyarse en los conocimientos
aprendidos durante la educación primaria y no echar por la borda; que todas las
mujeres deberían continuar educándose. Tanto ellas como los hombres se dan
cuenta de que se necesitan cambios para hacer frente a las transformaciones que
vivía el país. Su compromiso con el proyecto era notable, en sus artículos
expresaban su punto de vista muy particular sobre los modos de vida vigentes y
al mismo tiempo reforzaban la conducta que tradicionalmente se les asignaba.
(Arredondo, 2008)
Aportaciones literarias de María Enriqueta en la educación porfirista
En 1877 y a través de un
golpe de estado, Porfirio Díaz alcanzó el poder, manteniéndose en él hasta
1911. La etapa del porfiriato se corresponde con el inicio y la consolidación
de la carrera literaria de María Enriqueta en suelo mexicano. En el seno de una
familia perteneciente a la alta burguesía mexicana del porfiriato, nació María
Enriqueta el 19 de enero de 1872, en Coatepec, Veracruz.
La literatura mexicana
empezaba a dar muestras de una preocupación por los acontecimientos históricos
y la narrativa de esos años. Pese a ello, María Enriqueta nunca quiso ese poder
público que el mundo literario le otorgó en la primera mitad del siglo XX y se
entregó a una carrera literaria discreta y coherente con su filosofía de la
vida la serenidad y el mantenimiento de los valores morales trasmitidos por sus
progenitores. Ofrecía a los pequeños lectores cuentos, poemas, adivinanzas,
fábulas, romances, canciones para juegos y consejos. A través de ellos se
pretendía realizar una labor pedagógica, como objetivo siempre presente en la
literatura de la escritora. (Los libros de historia para niños de primaria y la
identidad nacional 2008. pp. 250-268)
La colección Rosas de la
Infancia era utilizada como libros escolares para las niñas.
En 1914 María Enriqueta daba
a la prestigiada imprenta de la Casa Ch. Bouret los cinco volúmenes de Rosas de
la infancia, cuya composición iniciaría en 1912. En el caso de los libros de
lectura utilizados en las escuelas primarias mexicanas durante las décadas de
1910 a 1930, sobresalen los escritos por María Enriqueta: Rosas de la infancia,
como libros elementales de Veracruz solo en las escuelas de niñas que se publicaron a principios de 1910, y que
se siguieron publicando varias décadas después, incluso fueron recomendados por
la misma Secretaría de Educación Pública (SEP) como textos de lectura para
todas las escuelas primarias. Esto sucedió cuando José Vasconcelos dirigió la
nueva SEP en 1921.
Libros escolares de educación primaria
Finalmente, María Enriqueta Camarillo
de Pereyra asoció los valores humanos y la creación con la religión. A través
de sus libros la educación ayudaría a formar mexicanos fuertes, éticos,
solidarios, capaces de formar un México más rico y poderoso que el México de
hoy. Inculcaba la idea de un cambio que diera como resultado una nación más
justa y equitativa, gracias a la capacitación para el trabajo y la educación,
principalmente de las clases trabajadoras urbanas y rurales con vistas a su
desarrollo futuro como hombres y mujeres bien adaptados, socialmente hablando,
productivos y útiles para su familia y su comunidad. Sus aportaciones literarias
en la educación permitieron que su colección Rosas de la Infancia formara parte
de los primeros libros de texto escolares durante esa época y que han
representado hasta nuestros días un legado en la historia cultural de nuestro
país. (María Enriqueta, 1928)
Conclusiones:
En este tema conocimos algunas
de las causas importantes que dieron auge a la literatura mexicana en el
periodo del Porfiriato como parte de un proceso histórico de nuestro país en
sus diferentes regiones.
Cabe mencionar que la
influencia de la elite francesa en nuestro país, permitió ampliar la cultura de
las clases marginadas que en ese momento predominaban y que gracias al interés
de mujeres de la alta burguesía lograron llegar a través de la literatura a
realizar cambio de mentalidades en los aspectos políticos, económicos y
sociales por los cuales pasaba el país. El modelo de vida francés, influyó en
la vida cotidiana de la clase mexicana con su formar de vestir, actuar y creer.
Finalmente, en las aportaciones de María Enriqueta, se
notó el gran interés por fomentar valores y trabajar por un país con mejores
condiciones sociales que permitiera en el ámbito educativo preparar hombres y
mujeres para contar y reconstruir la
historia del país.
Bibliografía:
·
Escalante, García y otros, Nueva historia
mínima de México ilustrada,El colegio de México. Primera edición 2008. Pág. 373
·
Gilly,
Adolfo, "La guerra de clases en la revolución mexicana", en
Interpretaciones de la revolución Mexicana. México, U AM- Nueva Imagen, 1979,
p. 24.
·
Toussaint
Alcaraz, Florence, Escenario de la prensa en el porfiriato. Fundación Manuel
Buendía. México, 1987.
·
Arredondo
Ramírez, Martha Luz (2008), “Los libros de historia para niños de primaria y la
identidad nacional”, en Antonio Padilla etal., La infancia en los siglos XIX y
XX. Discursos e imágenes, espacios y prácticas, México, Casa Juan
Pablos/Universidad Autónoma del Estado de Morelos, pp. 250-268.
·
Galindo
Peláez, Gerardo (2010), Formar en los corazones el culto por lo bueno y lo
bello: acercamiento a María Enriqueta Camarillo y Rosas de la infancia (texto
inédito).
·
María
Enriqueta (1928a), Rosas de la infancia. Lecturas para los niños. Libro
primero, México, Sociedad de Edición y Librería Franco Americana, col. Antigua
Casa Bouret y El Libro Francés Unidos.
